Con unos pocos elementos, la terraza se puede transformar en un espacio apto para ser disfrutado todo el año, incluyendo los meses más fríos. Si no nos creen, pongan atención a las siguientes imágenes:
Los cojines, mantas y pieles son un must absoluto, al igual que toque cálidos de luz, ya sea de velas, faroles o maceteros iluminados. ¡Son elementos que transforman una terraza veraniega en otoñal de la noche a la mañana!
Los fogones son otro imprescindible, al igual que los muebles de materiales nobles y cálidos como la madera, que siempre invitan a disfrutar de los espacios exteriores, sin importar el clima.